Hoy no me encontraba especialmente animado para escribir, ¿Por qué? Bueno a veces la vida te da palos muy gordos o te pone en frente retos que no esperas y que te caen de sopetón.
Ayer me encontraba muy cómodo sentado en mi sofá, jugando a la wii (recuerda que puedes alquilarla por 2 euros y ayudar a Solidaria) cuando recibí una de esas llamadas que quieres no recibir nunca, y que en cuanto cuelgas el teléfono te quedas helado y con los pelos de punta, de esas llamadas que te hacen darte cuenta que todos los problemas que puedes haber tenido con algún amigo quedan totalmente de lado ante lo devastador de los hechos. Porque después de todo, qué son los amigos si no aquellos con los que te enfadas y con los que te ríes, con los que te vas de cañas o con los que lloras, y por mucho que estés enfadado con alguien, llegado estos momentos, si realmente lo consideras tu amigo, lo apoyas en todo lo que puedes y en más.
Ayer más que nunca me he dado cuenta de que la vida no es otra cosa que un tic tac del reloj, que puede tener la misma duración de un suspiro y que una vez que esto pasa no queda nada mas que tristeza y oscuridad y ahí es donde quedamos los demás los que apoyamos, los que queremos, los solidarios, los que ayudamos a salir de esa oscuridad en la que muchas veces entramos.
Ayer, después de colgar el teléfono, tome mi abrigo y me dirigí a apoyar en todo lo que pude a una amiga, que ha sido una de esas personas que en su momento me sacó de la oscuridad en la que me encontraba, que fue un apoyo para mi cuando más la necesite y que llevaba un año sin prácticamente hablar con ella, ¿por qué?, porque la vida es así a veces te da golpecitos y los haces o los sientes mas grandes de lo que son, pero cuando ves que hay golpes que realmente son duros, dejas todo de lado para ir a ayudar a quien se lo merece.
Y muchos se preguntaran ¿Qué tiene que ver todo lo que nos cuentan hoy con Solidaria? Pues para mí, todo, Solidaria no es más que eso, ayudar, ayudar y ayudar desinteresadamente a la gente que realmente lo necesita y para eso me apunto yo y espero que te apuntes tú, porque recuerda… Hoy por ti mañana, tal vez, por mí…
Sergio.
PD: M. A. A. Sé que las palabras no ayudan en estos casos, pero ¿qué otra cosa puedo hacer si no apoyarte en todo lo que necesitas?, sabes que siempre vas a poder contar conmigo para lo que sea y para lo que necesites, no importa que estemos distanciados o alejados por cuestiones de la vida, en mí siempre vas a tener un amigo.
domingo, 10 de mayo de 2009
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